¿Por qué elegir un termómetro infrarrojo?
Un termómetro infrarrojo es una herramienta versátil utilizada para medir la temperatura sin contacto.
Hoy en día, el termómetro infrarrojo se ha convertido en una herramienta versátil para medir la temperatura sin contacto. La cual tiene múltiples aplicaciones en la industria, para el monitoreo de procesos, mantenimiento de equipos, entre otros.
Por esta razón, Fluke dentro de su gama de productos cuenta con el FLUKE-62 MAX+ ESPR. Este termómetro infrarrojo permite medir temperaturas de - 30°C a 650 ºC.
Su función base es determinar la temperatura superficial a través de la medición de la cantidad de energía infrarroja. La cual es radiada por la superficie de un objeto en específico.
Esto lo convierte en una herramienta de diagnóstico práctica, de tamaño compacto, y de gran precisión. Diseñada para medir la temperatura de forma instantánea sin contacto en áreas peligrosas o de difícil acceso.
A continuación, te mostraremos 4 razones para elegir este termómetro infrarrojo.
Razones de elegir un termómetro infrarrojo FLUKE
A prueba de polvo y agua
La clasificación IP54 le permite trabajar bajo cualquier condición e incluso en las áreas industriales con mayor cantidad de polvo.
Resistencia y diseño compacto
Gran resistencia puede soportar caídas de hasta 3 m, además cuenta con un diseño compacto y ligero.
Lo que lo hace fácil de usar y de llevar sin importar el tipo de aplicación o actividad a realizar.
Distancia al punto de exploración y doble láser
La tecnología láser del FLUKE-62 MAX+ ESPR permite efectuar mediciones de alta precisión y repetibles.
De hecho, cuentan con 2 láseres que le ayudan a identificar la zona que desea medir. Esta zona es la que queda entre los puntos.
Valores máximos/mínimos y alarma
Muestra el máximo, mínimo o promedio de temperatura, así como también la diferencia entre 2 medidas.
Además, posee alarma "Hi" y "Low" para una visualización rápida de las mediciones que están fuera de los límites.